Vistazul salió con una marcha más. Con un Buso muy acertado y un bloque defensivo comprometido, los de Almagro frenaron el ritmo ofensivo de Mideba y marcaron el compás del inicio. El 10–14 mostró un equipo concentrado, valiente y sin complejos ante un rival poderoso.

Este periodo dejó la imagen más reconocible del nuevo Vistazul: solidario, ordenado y con paciencia en ataque. Frutos Cabeza y Ortega Rico empezaron a conectar, Bucinskas encontró aro con su clásico tiro frontal y Vargas ganó presencia interior. Solo un punto separó a ambos equipos: 14–15. En ese momento, Vistazul estaba totalmente dentro del partido… y demostrando que puede competir con cualquiera.

El desgaste de tanto esfuerzo defensivo pasó factura. El acierto cayó y Mideba aprovechó su profundidad y experiencia. Fue el único tramo realmente negativo del encuentro, con solo 6 puntos anotados y varias acciones que se escaparon por detalles. Aun así, el equipo no perdió la cara y siguió peleando cada posesión.

Lejos de desconectarse, Vistazul volvió a sacar orgullo en los minutos finales. Vargas Prado se echó el ataque a la espalda y cerró un gran día con 16 puntos.

Buso siguió acumulando buenos números, Ortega Rico manejó el ritmo y el banquillo aportó energía en defensa.

l equipo anotó 18 puntos en este último cuarto, demostrando que no se dejó ir y que la actitud competitiva ya es parte de su ADN. Los mejores jugadores del BSR Vistazul fueron: Buso, con 15 puntos y 6 rebotes; Zymantas Bucinskas (15), con 11 puntos y 4 rebotes, Vargas (76), con 6 puntos y 3 rebotes y Lourdes Ortega (26), con 6 puntos y 2 rebotes.