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En una temporada tan larga y con un sistema de competición donde la liga regular lo es todo, cada partido cuenta. Quizás por ello utilizar los fallos para construir sobre ellos mejorando sea la mejor receta, y es que el Econy Gran Canaria dejó atrás su irregularidad de la semana pasada para encontrar ante Iberconsa AMFIV esa versión con la que sí van a optar a cosas importantes en este atípico curso.

La pelea con la que comenzó el encuentro fue la muestra de que una de las claves del mismo pasaba por defender mejor. En ese sentido, los dos equipos metieron mucha silla de inicio, dificultando cada ataque y cada lanzamiento. Sin embargo, pese a encontrar tiros relativamente cómodos en algunos momentos, el Econy no terminó de coger el ritmo necesario para dominar.

Por su parte, AMFIV no se quedó atrás y fue demostrando que la mejoría que había experimentado en las últimas semanas no era casualidad. Con ambos combatientes queriendo imponer su intensidad, el partido quedó marcado por la igualdad, aunque el cuadro amarillo aprovechó un momento de desacierto visitante para entrar en calor y así poder escaparse en el marcador (19-10).

Poco cambió tras ese pequeño receso, pero el Econy continuó teniendo problemas con el acierto, un aspecto que les impedía seguir alejándose. Aun así, la muñequita de Hollermann sí que funcionó y eso dio alas a la buena defensa insular. Otra estirada del AMFIV les ayudó a mantenerse en partido tras un tiempo muerto, aunque los amarillos siguieron teniendo acierto.

La aparición de Nortje le dio un poco más de mordiente al ataque grancanario justo en otro de esos momentos donde anotar costaba mucho. Se estaba cociendo poco a poco el choque para que los de Jonay Caraballo fueran ganando ventaja merced a un enorme esfuerzo y a un gran compromiso, algo que se certificó al acabar el primer tiempo con buenas sensaciones (39-20).

La defensa de los canarios se mantuvo a buen nivel en el arranque de la segunda parte y eso se tradujo en un AMFIV incómodo. Sin Edwards, eliminado por faltas, el cuadro vigués tenía que tratar de igualar de nuevo la intensidad de su rival, algo que trataba de conseguir desde los puntos de Romo. Aun así, era muy complicado recortar distancias con el colchón que ya tenía en su mano el Econy Gran Canaria.

Eso sí, el cuarto se igualó bastante en comparación con lo visto antes del descanso. Por momentos, el cuadro isleño no encontró buenas situaciones y, por otros, se precipitó a la hora de atacar. No obstante, pese a algunos errores, el control siguió siendo amarillo, y era normal que se equilibrarán las balanzas dado que el conjunto gallego también jugaba y luchaba con todo lo que tenía sin miramientos (60-32).

Aún con la diferencia en el marcador, el encuentro siguió estando disputado. El duelo de sillas había sido denominador común durante todo el partido y en este periodo no iba a ser menos. El Econy mantuvo su línea de trabajo tratando de encontrar su ritmo ofensivo y marcando a fuego esas normas defensivas con las que tratar de crecer pensando también en los partidos que están por venir.

Con todo decidido, Jonay Caraballo comenzó a rotar un poco más el banquillo grancanario para refrescar el juego y dar oportunidades. AMFIV no dejó de hacer su trabajo y pese al marcador no quiso bajar los brazos, aguantando y peleando como había hecho durante los cuarenta minutos. Sin embargo, la victoria ya era de los insulares que, tras su irregular partido el domingo pasado, despertaron (75-45).