Zuzenak:.

Zuzenak es de nuevo equipo de División de honor, un objetivo que no entraba en las previsiones de la temporada y que ha supuesto la gran sorpresa de esta final four celebrada en Alcalá de Henares. Si sorprendente fue eliminar en semifinales al gran favorito, el Alcorcón, más quizás aún la madurez con la que los de Aitor Iturricastillo afrontaron la final ante el Servigest Burgos, favorito a priori. Se da la circunstancia de que ni contra madrileños ni burgaleses los alaveses han sido capaces de vencer en liga regular, sin embargo, en esa fase de ascenso, se han mostrado superiores en todas las facetas del juego.

La final solo tuvo un primer período de equilibrio, para sopesar energías tras el esfuerzo del día anterior. Pero si de algo anda sobrado este Zuzenak es de juventud y talento. Una plantilla con 23 años de media, ningún jugador foráneo contratado, y todos procedentes de la cantera. David contra Goliat. Tras un parcial 14-19, Zuzenak desplegó su artillería, apretó su carácter defensivo para desplegar ese juego rápido y en velocidad, con altos porcentajes de tiro de dos con un 67% , con ventajas en el “mismatch”, con juego colectivo como certifican las 19 asistencias.

La contundencia del 2-16 antes del descanso, dejaba casi escrita la sentencia para incredulidad de los burgaleses. No hubio reacción, sino otro acelerón de los alaveses en la reanudación, sin confianzas. Cada uno en su rol, Viso sumando y asistiendo 17 puntos 10 asistencias, Reguero poniendo puntos en la pintura, Adrián exhibiendo su muñeca y dirigiendo, David Ramos y Alejandro dando solidez, Beatriz Zudaire sintiéndose importante, Martín sacrificándose en defensa, Vela y Gonzalo siendo jugadores de equipo. La ventaja ascendía a los 23 puntos (36-59) a falta de siete minutos.

Sin apuros, sabiendo manejar esa renta, los aficionados y el propio equipo empezó a rumiar el éxito. En Servigest, los intentos de Pablo López “Piti”, máximo anotador del choque con 32 puntos, de agarrarse al milagro no fueron fructíferos. Durante 30 minutos, los castellanos estuvieron a merced de este grupo de jóvenes con infinito talento que han escrito una de las páginas más hermosas de los más de 30 años del club Zuzenak. Fueron y vencieron en Alcalá de Henares. El Zuzenak regresa a la élite del baloncesto en silla por la puerta grande.